
No importa el país, ni el género ni la religión, ni siquiera si el pensamiento político es uno u otro… Todos los gobiernos del mundo han tenido grandes escándalos a sus espaldas, siendo esto el origen de esa frase tan escuchada y temida: las cloacas del poder. En especial, durante este último siglo, donde las democracias han ido surgiendo y estableciéndose, estas acciones realizadas bajo cuerda y con el intento de ocultarse obtuvieron mucha más atención si cabe; y así se han convertido en noticia y han quedado en los anales de la historia:
- Watergate: El escándalo de Watergate estalló después de la irrupción de junio de 1972 en la sede del Comité Nacional Demócrata en el complejo de oficinas de Watergate de Washington DC. La administración de Nixon inicialmente intentó encubrir su participación, pero finalmente llevó a la renuncia de Nixon, la primera y única renuncia presidencial en EEUU hasta la fecha. Todavía no hay una explicación concluyente de lo que realmente estaban tratando de lograr con el robo.
- Clinton/Lewinski: Infame por su firme negación y luego por la posterior admisión de haber tenido una aventura amorosa con Monica Lewinsky, de 22 años y miembro de la Casa Blanca, Bill Clinton enfrentó un juicio político por perjurio y obstrucción de la justicia, aunque luego fue absuelto.
- Certificado de nacimiento de Barack Obama: A lo largo de su campaña y gran parte de su presidencia, el presidente Obama enfrentó rumores y controversias sobre la validez de su certificado de nacimiento hawaiano. Si bien la publicación de sus certificados de nacimiento de forma corta y larga demostró su lugar de nacimiento, muchos teóricos de la conspiración creen que estos certificados son falsificaciones.
- Moshe Katsav: Moshe Katsav, ex presidente de Israel, fue acusado de violar y acosar sexualmente a diez mujeres. Mientras todavía estaba en la oficina, la policía allanó su casa y confiscó ordenadores y documentos. Hubo llamados para que renunciara o se suspendiera de la presidencia, lo que se negó a hacer. Sin embargo, después de renunciar, perdió su inmunidad presidencial y fue condenado de inmediato por los delitos, solo para ser liberado a los cinco años de su mandato de siete años.
- Las fiestas de Berlusconi: El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, estuvo involucrado en muchos problemas en sus 17 años en el cargo. Era conocido como playboy, defraudador, estafador y gángster. La más famosa de sus escapadas, sin embargo, fueron probablemente las grandes fiestas promiscuas que organizó y que llegaron a ser conocidas por el término de «Bunga Bunga».
- Chen Shui-bian: Aunque el presidente Chen Shui-bian quería ver un Taiwán fuerte e independiente, la falta de autocontrol de su familia (y la suya propia) logró socavar muchas de sus posiciones. Su yerno fue atrapado por lavado de dinero y uso de información privilegiada, su esposa transfirió más de 21 millones de dólares a varios bancos del mundo y fue arrestado después de su renuncia por malversación de fondos y recibir sobornos.

Desde la invención de los gobiernos y la muy noble y sacrificada profesión de la política, se han cambiado muchas cosas en la historia, no lo negaré. Pero si hay algo que a los políticos se les da bien, no es precisamente actuar en cualquier tema, sino debatir sobre él. Cierto, se supone que ellos llevan a las cámaras de debate el sentir, los deseos y las aspiraciones del pueblo, aunque algunos de estos debates sólo han dado a entender que el pueblo está dividido ante ciertas cuestiones, y no sabe muy bien cómo posicionarse al respecto; lo que da como resultado que los políticos hablen y hablen, traigan ciertos asuntos a la actualidad una y otra vez, pero no se acabe de dar con una postura que satisfaga a la gran mayoría, sólo a una parte lo suficientemente importante como para mantener la armonía.
¿Te gustaría saber cuáles han sido las mayores cuestiones que nuestros políticos han debatido incansablemente durante el devenir de la historia? Pues sigue leyendo:
- La esclavitud: Si bien ha sido criticada durante décadas, la esclavitud todavía existe en algunas economías del mundo, aún de manera subterránea. La abolición de la esclavitud llevó a un país a una Guerra Civil, pero aún hoy se debate si los esclavos son sólo mano de obra barata o realmente se les cuida como profesionales cualificados (mejor no opinar en este sentido).
- Edad para el consumo de alcohol: La mayoría de los países del mundo fijan la edad para beber a los 18 años, más jóvenes en ciertas circunstancias donde la cerveza o el vino se consumen con una comida o bajo la supervisión de los padres. Aunque se busca conseguir un consumo responsable, se ha notado que el retrasar la toma de alcohol hasta la mayoría de edad, en ocasiones ha conseguido que los más jóvenes lo ingieran más.
- Gobierno y religión: Muchos países de todo el mundo se han establecido sobre la base del secularismo, es decir, la separación de la Iglesia y el Estado. Los partidarios de la separación creen que las creencias personales no deberían involucrarse en la política, y se debería permitir que las personas practiquen como lo deseen, mientras que los opositores argumentan que una religión estatal ayuda a mantener un gobierno y una sociedad moral y puede ayudar a controlar grupos radicales.
- La prostitución: En general, cuanto más religiosa es la población de un país, más probable es que su gobierno rechace la despenalización o legalización de la «profesión más antigua del mundo». Los defensores de la legalización de la prostitución argumentan que hace que sea más seguro para los trabajadores y aumenta los ingresos fiscales, mientras que los opositores sostienen que conduce a una mayor transmisión de ETS y tráfico de personas.
- Derecho al voto: La capacidad de votar y hacer que se escuche su voz es la piedra angular de la democracia moderna. Pero, durante la mayor parte de la historia moderna, grandes franjas de personas tienen prohibido votar. La extensión del sufragio a los negros y las mujeres (en el contexto estadounidense, al menos) ahora cuenta (en su mayoría) con apoyo universal, pero en el pasado los defensores del sufragio limitado argumentaron que estos grupos carecían de educación y no podían tomar decisiones racionales, mientras que los partidarios del sufragio afirmaron que su valor como personas significaba que tenían derecho a los mismos privilegios de voto.